lunes, 14 de noviembre de 2011

Charles Bukowski - Hollywood

"Todavía era la hora de los grupos separados. Incluso en aquel patio destartalado había zonas de gueto, zonas Malibú y zonas Beverly Hills. Por ejemplo, los mejores vestidos, con ropas de diseño, estaban juntos. Cada tipo reconocía a los de su misma clase y no parecía mostrar ninguna inclinación a mezclarse. Yo estaba sorprendido de que alguno de ellos hubiera estado dispuesto a venir a un gueto negro de Venice. "Chic", pensarían, tal vez. Por supuesto, lo que hacía que todo aquello apestara era que muchos de los ricos y de los famosos fueran en realidad tontos del culo e hijos de puta. Simplemente les había tocado un chollazo en alguna parte. O se habían enriquecido gracias a la estupidez del público en general. Normalmente eran gente sin talento, sin alma, ciegos, eran pedazos de mierda andantes, pero para el público eran como dioses, hermosos y venerados. El mal gusto crea muchos más millonarios que el buen gusto. Al final se reduce a la cuestión de quién obtiene la mayor parte de los votos. En el país de los topos un topo es rey. Así que ¿quién se merecía algo? Nadie se merecía nada..."

1 comentarios:

Sara Almeida, una de cien gaviotas dijo...

En el país de los topos un topo es rey. Así que ¿quién se merecía algo? Nadie se merecía nada..."

Qué buenos fragmentos que cuelgas, me gustan :) me alegro que te hayas pasado por mi blog, yo sin duda seguiré leyéndote ! Saludos con sabor a lectura.

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